Hallan sin vida al desaparecido en Viotá; se mantienen los operativos en La Calera y Cáqueza.
Las intensas lluvias registradas durante el fin de semana encendieron las alertas en Cundinamarca. El gobernador Jorge Rey confirmó la activación de operativos especiales en Viotá, La Calera y Cáqueza, territorios que registraron emergencias de distinta magnitud. El objetivo, señaló, es mantener la asistencia inmediata a las comunidades afectadas y asegurar presencia institucional en cada punto crítico.
En Viotá, tras varios días de búsqueda, fue hallado el cuerpo sin vida de Fernando Feriado, de 51 años, quien había desaparecido luego de una creciente súbita del río Calandaima. El hallazgo se produjo en la vereda Ruidosa, a unos 500 metros del lugar donde varias personas fueron arrastradas por la corriente. Las autoridades esperan al CTI de la Fiscalía para adelantar el proceso de levantamiento. Previamente, cinco personas habían sido rescatadas con vida, una de ellas aún permanece hospitalizada.
La Calera también registró graves afectaciones: inundaciones, caídas de árboles y daños en viviendas y establecimientos comerciales en la vereda La Portada y los sectores de Salitre y San Rafael, golpeados por tormenta eléctrica y granizada. Un censo preliminar reporta 16 familias afectadas y será consolidado este lunes para definir las ayudas necesarias. Los bomberos y el CMGRD trabajan en terreno para despejar vías y evaluar riesgos.
En Cáqueza, varios barrios y veredas reportan acumulación de agua en viviendas por fallas en el sistema de alcantarillado. El municipio adelanta el proceso de Evaluación de Daños y Análisis de Necesidades (EDAN), herramienta técnica que permitirá establecer el nivel de impacto y las prioridades de atención. Desde la Gobernación se insiste en el trabajo conjunto con los Consejos Municipales de Gestión del Riesgo para mantener presencia en los territorios y acompañar a cada familia afectada.